Hasta el día de hoy usted no ha firmado documento alguno que le otorgue al Estado facultades para despojarlo de lo que le pertenece. Aún así es impelido por la fuerza a pagar impuestos, y bastaría con que dejara de hacerlo para que se diera cuenta de que habla de manera algo impropia cuando dice micasa, mi auto o mí mismo (porque usted trabaja para el Fisco varios meses del año, se lo garantizo).
Si además es de los que puede prescindir de los servicios públicos que son relevantes en el presupuesto familiar- como la educación, la salud o el transporte- su carga impositiva es doble y paga por prestaciones que no recibe sin derecho alguno a devolución (y no intente conseguirla, porque sus demandas no recibirán el título de ciudadanas).
Hasta ahora el Estado no ha tenido tampoco la gentileza de reconocer- si tiene hijos- que usted ha hecho un aporte significativo a la patria con el nacimiento de futuros contribuyentes. Por esa sola razón usted podría legítimamente pedir un trato preferente de parte del SII, pero la verdad es que en Chile los hijos son penas desde el punto de vista impositivo.
Quizá éstas y otras consideraciones le llevan a usted a pensar que los impuestos son la forma que encontró el Estado para despojarlo, pero debo decirle que se equivoca. Pagar impuestos es un deber, un deber que la izquierda justifica con los peores argumentos posibles, pero que no deja por eso de serlo.
Porque cuando el cobro de impuestos se defiende (como lo hace la izquierda) desde el concepto de redistribución, lo que se pone en tela de juicio es el derecho de propiedad; y dado que los derechos proliferan ahora en tierra fértil, asumo será posible admitir que éste es también uno de los que se debe custodiar. Desde la idea de que el Estado puede expropiar a unos para favorecer a otros (o sea, redistribuir), los impuestos no serían más que un robo institucionalizado.
¡Para qué decir cuando los que defienden a brazo partido el carácter subjetivo de la moral, hacen una apología cuasi religiosa de los impuestos! (remítase a la columna dominical de Peña). Ni la filantropía ni la generosidad son argumentos posibles para justificar la obligación de pagarlos. Entre otras cosas, porque el acto generoso o filantrópico es esencialmente libre. Y es que a diferencia del pseudo-liberal, el conservador es tan consciente de su obligación de dar más si tiene más, como de la prohibición que tiene de imponerle a otro que haga lo mismo por la fuerza.
Pagar impuestos es un deber, es cierto, pero no por las razones que ofrece la izquierda, sino simplemente como una forma de retribución a los beneficios innegables e intangibles que ofrece la vida en sociedad. En el fondo, es el precio a pagar por vivir en un lugar más hospitalario que la jungla.
Negarlo es defender el supuesto pueril de que todo lo que uno es, se lo debe a sí mismo. El orden jurídico institucional y social, el idioma, la cultura, contribuyen al desarrollo de una persona tanto como su propio esfuerzo y lo dejan (lamentable, pero así es) en la amarga condición de deudor: es decir, de contribuyente.
Pagar impuestos es un deber, lo concedo, pero dejemos la hipocresía de defenderlos desde una moralina de quinta categoría.
Sra. Marinovic:
ResponderEliminarNo dejan de llamarme la atención sus columnas. Celebro el intento de pensamiento, de argumentación y de diálogo para colaborar a la construcción común de la ciudad a la que todos pertenecemos. En este sentido, la animo a justificar algunos de los supuestos desde los que ud. escribe, piensa y no siempre declara.
¿Quién y qué es el Estado? ¿Cuál es el rol de la política y del poder ejecutivo? ¿Es una mera administración de bienes de servicio para los que no “pueden prescindir de los servicios públicos que son relevantes en el presupuesto familiar- como la educación, la salud o el transporte”? ¿Qué consecuencias político sociales tiene esta concepción?
¿Cómo entiende usted la persistencia desigualdad en nuestro país y en nuestro continente? ¿Qué la produce y reproduce?
¿Por qué el derecho a la propiedad tiene privilegio sobre otros?
La vida en sociedad, ¿es sólo una fuente de “beneficios innegables e intangibles”? ¿Qué antropología hay detrás de quien dice que “los impuestos son un precio a pagar por vivir en un lugar más hospitalario que la jungla”?
Como ud. señala, “negarlo es defender el supuesto pueril de que todo lo que uno es, se lo debe a sí mismo. El orden jurídico institucional y social, el idioma, la cultura, contribuyen al desarrollo de una persona tanto como su propio esfuerzo y lo dejan (lamentable, pero así es) en la amarga condición de deudor: es decir, de contribuyente”. ¿Por qué es lamentable ser deudor? ¿Es ud. una lamentable deudora de su familia, de sus padres, de sus amigos”? ¿De qué manera entiende ud. la gratuidad y al gratitud?
Sabiendo que mis preguntas tienen supuestos desde los que yo vivo y pienso, espero que sirvan para entrar en diálogo.
Nemo Castelli SJ.
No puedes intentar ser màs objetiva?Obvio no te gusta la izquierda.Pero no te quedes en el pasado.Hay una izquierda democratica y de larga data en Europa.Objetivamente segun tus supuestos la modalidad y las tasas impositivas incluso a la clase media pagadas por los contribuyentes pagadas en esos paises y Estados Unidos serian si se aplicaran en Chile expropiatorias e injustas.Tu crees en conciencia que en Chile ciertos segmentos de la poblacion pagan verdaderamente los impuestos que deberian en justicia pagar?
ResponderEliminarExiste una jungla de artimañas que muchos chilenos acomodados practican precisamente para eludir el pago de impuestos.Todos lo saben.Sociedades familiares,compra de vehiculos para uso presunto de empresas y luego son usados como vehiculos familiares.Etc,etc,
Lo que no pueden hacerlo solo son los pobres. Pero si pagan impuestos en todo lo que compran para comer y malamente vestirse.
Creo que te falta impregnarte de una moral social que se practica desde la pobreza.Si eres catolica deberias tener muy claro que el verdadera doctrina catolica hace de la generosidad una obligacion no solo etica sino humana.Quien es egoista se auto excluye de los demàs y es el unico perjudicado.
La jungla que tu describes existe en Chile pero con otros actores y en otros temas en los cuales tu deliberadamente omites o no ves.Como en la inequidad de los ingresos.Sabes tu que 4.000 personas en Chile perciben un equivalente de 19 millones de pesos mensuales?En to racionalidad y en tu conciencia como lo intepretas sin sentirte afectado frente a personas que viven con 75.000 mensuales y ancianos o invalidos y que son màs que 4 mil.Tu no respondes nunca los comentarios,pero te haria bien leerlos.Chile no es el pais que tu ves.Es otro màs complejo,rico y diverso.El centro no son las cosas materiales ni menos el dinero son las personas.Si las colocaras a ellas y no solo a una clase social como centro de tus preocupaciones te aseguro mejorarian tanto la calidad como la objetividad de tus articulos y tendrias màs lectores.Uno escribe no para una auto satifaccion intelectual que no es tal,sino para orientar a los demàs en buscar la verdad.Veo que lees mucha cosa de afuera,yo tambien lo hago.Pero no puedess eludir el hecho de hacerte cargo de que aun en esos paises el conservadurismo que podria ser una opcion por el grado de equidad y humanidad que tienen es una minoria,pretender y te lo reitero ser conservador en Chile es aislarse en una torre de cristal similar a la que deben usar los niños enfermos que deben ser recluidos en una camara especial porque si se exponen al medio ambiente real se mueren.
Hay una fundación TU cerebro, te juro que daría todo por esa pobre y vacía fundación... Desde tus comentarios desde el SIDA, a la homosexualidad... Eres una vergüenza de educadora... Me das pena, creo que tus estudios como ya te comenté, están tan poco actualizados como tus ideales político/sociales... Usas de referencia teorías que no dominas NI DE LEJOS en su totalidad, ni comprendes bien... Me estoy por titular de la católica, donde tu también te titulaste... Hice un para de cursos en sociología y AUN YO puedo entender mejor a tus autores... Y me da una vergüenza extrema titularme de una universidad que te consideró apta para titularte... Espero que no eduques a tus hijos en casa, porque por gente como tú está pasando lo que está pasando en Chile e incluso en EEUU con "occupy wall street" movimiento que no debes conocer, porque no sacas la cabeza de tu olla marmicoc que tienes en la cocina... Hay algo que se llama empatizar, es lo que muchos autores llaman humanidad, no como los tuyos que la consideran la RAZÓN... Y daría mi reino que, como tu encuentras anormal la homosexualidad y la adopción por parte de padres homosexuales, hubiese una entidad legal que viera el nivel de resentimiento en tu pequeña cabeza y viera lo peligroso que es para unos niños ser educados como gente como tú... Lo que provoca y enseñas con tus comentarios llenos de odio y además ignorancia... Yo ya te comenté en otro articulo, igual de ridículo que esto, el cual no fuiste capaz de responder... Ahora lo hago personal, me desagradas, me das vergüenza y creo que no vales ni como académica, ni mucho menos ser humano... NO SIN RAZONES, por la razón que ya te di... Para los autores y escuelas que yo sigo, la capacidad de comprensión de la emocionalidad ajena es lo que te hace humano y tu aparte de empatizar contigo misma, careces de humanidad alguna.
ResponderEliminarSi fueras a un hogar de acogida y vieras la necesidad de cariño que tiene los niños, la cantidad de padres heterosexuales con anomalías emocionales parecidas a las tuyas que abandonan a sus hijos... Sal de tu casa, no a regar las plantas... A darte un golpe de realidad.
Mauricio López
16.321.726-0
mzlopez@uc.cl (a ver si nos hacemos amiguis en la reunión de ex alumnos)
El hecho de imponer límites a las tasas de los impuestos (ej: Renta) descansa sobre la idea que, superados tales límites, el impuesto pasa a ser expropiatorio. Los argentinos lo fijaron en un 33%, creo (Corte Suprema); en Chile se fija en un 45%, pero el impuesto se separa por tramos.
ResponderEliminarPor tanto, siempre se ha considerado que el impuesto afecta el derecho de propiedad.
En cuanto a la justificación, puedes esbozar la que más te acomode. Quejarse de las justificaciones de izquierda o de derecha es ejercicio inútil
A propósito de su columna sobre las ideas de izquierda...
ResponderEliminarMe llama profundamente la atención que como filosofa considere que las leyes naturales de la física puedan ser aplicables a la "conducta humana"... como si acaso existiera algo natural en su constitución. Déjeme decirle que el naturalismo nacido con la ideología ilustrada de la modernidad ya lleva sus siglos. Es hora que los filósofos retrógrados dejen descansar de una vez por todas esas ideas.
Me sorprende que estudies tanto el pensamiento de otros y ni aun así conseguir convencer con tu discurso anarcofascista (como diría un profe muy original). ¿Será que nos enseña más la vida? Sal de tu casa, acompaña a la nana a su casa y vuelve en Transantiago.
ResponderEliminarEstaré atenta a tu tesis doctoral.